Como ya les contamos en otras entradas, viajar por Cuba «baratamente» no es tan simple. Aquí les contaremos nuestro primer viaje de 14 horas desde La Habana hasta Bayamo.
Yo tengo una cara de gringa impresionante, así que aunque no hable se nota que no soy cubana y además llevábamos las mochilas grandes. Cuando Jaimis subió al camión después que yo, me dijo: » Suka, trata de no llamar la atención, pórtate bien». Y elegimos nuestros asientos. Nos sentamos en los asientos que se viaja de espaldas rogando no marearnos. Al lado de mi lugar había una tablita de madera. Yo supuse que ahí no viajaría nadie, y planeaba después apoyar mi mochila pequeña y recostarme. Atrás de la tablita esa se sentó Jaimis con una mochila grande prácticamente donde iban sus pies.
Nosotros desde las 2 p.m. que nos fuimos de La Habana no habíamos tomado ni comido nada para que no nos agarre malestar en el viaje. Sobre todo porque viajábamos de espaldas. Pero a partir de esa última parada me agarró mucho dolor de panza y ganas de ir corriendo a un baño. Obviamente tenía que aguantarme. Sudaba frío. Creo que nunca me sentí así. Aguante 3 o 4 horas en ese estado. Ya cuando estaba apunto de tirarme del camión, me di cuenta que estábamos en la entrada del pueblo. Eran las 5 a.m. El resto mejor no lo cuento ja!
6 comentarios
Muy bueno el articulo, saludos y buenas vibras siempre
Pero tu eres la leche!! jaja desde las 2 de la tarde hasta las 5 de la mañana ¿cuantos kilometros??
¿Preguntan si sois cubanos el macahcante? porque la verdad, q tu das por escocesa mas que por latina, jiji. El chileno dice, jaaaaaaaaaja, me partoooooooo, muy bueno el post, menos por el sudor frio, que te duró horas…
jajaj no preguntan si sos Cubano o no… pero se dan cuenta y tratan de cobrarte mas caro. Ahí hay que ponerse firme y decir: si yo viajo como el cuano, entonces pago como el cubano.
jajjaajjaja genial tu relato
jajajjajajajajaja, me encanto este relato, jajjajaja genial gracias por compartirlo voy a la HABANA en enero.
[…] nos quedamos con las ganas de probar este medio pero una amiga, Tati, sí lo utilizó mucho y acá podes ver cómo le […]