Trinidad es una ciudad colonial. Las casas antiguamente eran casonas grandes, con patios interiores, que ahora están subdivididas en casas más pequeñas. Tienen ventanas tan grandes, que llegan hasta el piso. Los pisos son coloniales también con distintos dibujos y con muchos colores. Las calles de la ciudad son de piedra. Y todas esas características hacen que Trinidad sea la perla colonial de Cuba.
Es un destino bastante turístico porque además queda bastante cerca de la La Habana. Se ven manadas de turistas caminando por las calles.
Nosotros en Trinidad lo que hicimos fue salir a caminar por las callecitas, y seguir los caminos a ver a donde nos llevaban. Queríamos ver la ciudad desde arriba para contemplar los techos coloniales, pero terminamos en un mirador que había dentro de un hotel que era un poco lejos y no era la idea que teníamos. Pero ya estando ahí cerca, vimos un grupo de muchachotes morenos tomando cerveza. Una chica que estaba cerca de ellos, nos ve pasar y me pide jabón. Le digo que no tengo, y me pregunta si estoy en el hotel. Y sin dejar de caminar y riéndome le que dije: no, ojalá (aunque no es la realidad de lo que pienso, me gusta ir a casas de familia muchos más que ir a un hotel). Entonces los muchachos también se ríen y nos preguntan de donde somos. Estábamos fuera del sector turístico, y los muchachos eran muy grandotes. Respondimos de lejos que somos de Ecuador y de Argentina. Y empezaron diciéndonos que en Ecuador se estaba muy bien. Y Jaimis empezó a contradecirlos, a decirles las cosas malas y a destacar las cosas buenas de Cuba. Entonces cuentan que el vecino vivió en Ecuador, pero regresó a Cuba. Jaimis dijo que por alguna razón habrá regresado. Lo llamaron al vecino, y para ese entonces ya estábamos sentados con ellos compartiendo la cerveza y debatiendo. El hombre contó su experiencia, el sacrificio que tuvo que hacer allá y dijo que no se iría nunca más de Cuba. Los otros muchachos terminaron valorando más la vida que tienen, la tranquilidad, la seguridad, y el hecho de estar un viernes a las 5 de la tarde, disfrutando de una cerveza entre amigos en la calle.
Al otro día fuimos a Playa Ancon que está muy cerca de Trinidad. Como no funcionaban los colectivos, conseguimos un taxi en conjunto con un señor Inglés. Con mi inglés básico lo convencí de compartir un taxi, y buscar el más barato de toda la ciudad. Mientras esperábamos a Jaimis, me contó que en esos días había muerto Margaret Tacher. Y terminamos hablando de las Islas Malvinas. Obviamente creo que las guerras no tienen sentido y que los gobiernos no siempre representan los intereses de la gente. Nuestra conversación fue un claro ejemplo de eso. El viejito era un copado, andaba viajando solo, hospedándose en casas de familia y sin un plan fijo. En el camino vimos a dos chicos haciendo dedo, y eran Maryo y Valter, que los levantamos con el taxi y nos apretamos para poder llevarlos. Pasamos todo el día con ellos en la playa. Nos contaron muchas cosas de cómo era estudiar en Cuba, con sus pro y sus contra. Ellos ya llevaban 6 años en el país y les encanta. Pasaron sus momento duros, más que nada en el sentido de la convivencia, entre tantas personas de distintos lugares del mundo, distintas costumbres y distintas creencias. Más la falta de intimidad. A la noche fuimos a comer los cuatro al restaurante de Katty. la mamita de Valter, que nos cobró la mitad del precio real, porque es un restaurante muy bueno, se llama «La Coruña». Ella es una divina, lo adora a Valter y nos trató demasiado bien. La comida fue espectacular. Jaimis se pidió una paella y yo un pollo a la miel, ¡riquísimo!. Encima acompañados de gente linda y música cubana en vivo.
Finalmente no me quedé sin la vista superior de la ciudad que tanto buscaba. Los chicos me dijeron donde encontrarla. En el famoso Campanario. Tiene una torre con terrazas a distintas alturas desde donde se ven los techos de tejas rojas. Hermoso, encima lo vi al atardecer y me dejaron subir sin pagar.
También nos cruzamos con un carretillero poeta que nos recitó un poema sobre buenos aires:
Y vimos el festejo de un cumpleaños de 15:
Trinidad es una ciudad muy turística, tiene sus motivos para serlo, es realmente hermosa. Vale la pena perderse y salir de las callecitas turísticas para encontrarse con la gente.
INFO ÚTIL
Hospedaje
Mirella Rodriguez Naranjo:
Dir: Maceo (Gutierrez) # 557 A entre Pico Guinart y Simon Bolivar
Tel: (53 41) 993298
Hermosa la casa. Perfecta ubicación. Buenísima gente la señora y el marido. 10 CUC la habitación
Restaurante
Paladar «La Coruña»:
jattylahera62@gmail.com
Dir: Calle José Marti (Jesus Maria) # 430 entre Santiago Escobar y Fidel Claro
Qué ver
- El campanario
- Caminarse bien la ciudad
- Playa Ancon: sale una guagua a distintos horarios que cuesta 2 CUC por persona ida y vuelta. Si no salen las guaguas (como nos sucedió a nosotros), se puede conseguir un taxi por 10 CUC ida y vuelta y compartirlo entre 4 personas.
6 comentarios
Tambien se puede ir a Ancon en bici por 3 CUC, es muy lindo el paisaje! =)
Quiero que sepas que sos genial.
Ah , y que tu combi es una masa !!!!
Me voy en unos dias a Cuba de mochilero 45 dias ,, pero admiro tu viaje , estuve por ecuador , peru y bolivia pero hacerlo de corrido debe ser diferente.
Saludoss y que tu proyecto de asia se lleve a cabo de la mejor manera 😀
Tadeo
Tadeo que hermosísimo comentario que me dejaste, muchas gracias!!! Y bueno te vas a conocer Cuba mejor que yo entonces. Si queres me podés completar con info que me falte! Que la pases recontra bien, que aprendas y crezcas! Abrazos!!!
Pronto viajaré a cuba y tu comentarios y descripciones me gustan mucho. Gracias
Estoy a unos días de ir a Cuba y muero de emoción, la curiosidad y el hecho de enfrentarme a lo desconocido me invaden poco a poco. Pero me estoy documentando con tu blog para llegar preparada y saber lo que me espera.
Una duda: ¿qué equipo fotográfico usas?
Saludos (:
Che que bueno!
Uso una Cámara FujiFilm semiprofesional
Que la pases lindo!